¿Te has sorprendido calculando cuánto dinero se va cada mes en arriendo y preguntándote si podrías estar invirtiendo en algo propio? ¡Mantén la calma! Es una duda más común de lo que piensas. Decidir entre arrendar o comprar un departamento puede sentirse como una montaña rusa de números, temores y proyecciones. Por eso, aquí te ayudamos a poner en la balanza lo que realmente importa para tomar una decisión que te haga sentido con tus objetivos.
Este es uno de los grandes mitos alrededor. Y lo cierto es que sí, hay que tener gran cantidad del pie ahorrado. Por suerte, en Euroinmobiliaria el panorama es diferente, ya que puedes invertir en propiedades solo contando con el 3% del pie; mientras, nosotros te apoyamos con el 10%.
¿Y el resto? Puedes pagarlo en cuotas sin interés. Así, ahorrar todo el pie ya no es un muro imposible de superar.
A corto plazo puede parecerlo, pero cada peso que pagas en arriendo nunca vuelve. En cambio, cada dividiendo que pagas construye patrimonio. Además, con beneficios como Subsidio a la Tasa de Interés, hoy puedes tener un dividendo más bajo y estable.
La verdad es que pedir un crédito hipotecario no significa endeudarse para siempre sin beneficio. Al contrario: es una forma de invertir en algo que con el tiempo vale más. Si eliges bien la zona, tu propiedad ganará plusvalía con los años. Además, siempre es una opción venderla o arrendarla si es que en algún momento cambian tus planes.
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Ahora que derribamos los mitos, vayamos a lo importante: ¿qué sí es cierto y por qué vale la pena considerar comprar tu propio departamento?
Cada cuota que pagas por tu departamento se convierte en una inversión que te pertenece. No es dinero que se pierde en un arriendo mensual sin retorno, sino que va directo a tu patrimonio.
Con el tiempo, ese departamento puede convertirse en la base para financiar proyectos más grandes, respaldar un crédito o asegurar la educación de tus hijos. ¡Es tuyo! Y marca toda la diferencia.
Comprar un departamento significa tener un activo que resguarda tu estabilidad económica. Independiente de lo que pase con el mercado de arriendos o con tu arrendador, ahora tendrás un techo propio y la tranquilidad de saber que nadie puede quitarlo ni subirte el precio.
¿Te ha pasado que quieres pintar una pared o remodelar la cocina y no puedes porque la estás arrendando? Al ser propietario, decides libremente cómo decorar, remodelar o ampliar tu hogar, sin depender de permisos de un tercero. Además, nadie puede pedirte que entregues el lugar de un día para otro, el control es 100% tuyo.
Como mencionamos antes, uno de los grandes mitos es que necesitas tener todo el pie ahorrado para comprar. Hoy eso ya no es un obstáculo. Al invertir con nosotros, puedes comenzar pagando solo el 3% del pie al contado, te ayudamos con el 10% y el resto puedes cubrirlo en cuotas sin interés.
Así, dar el paso no significa vaciar todos tus ahorros de golpe, sino planificarlo de forma que no dificulte tus finanzas.
Comprar hoy es más conveniente que esperar. Con el Subsidio a la Tasa de Interés, puedes rebajar tu tasa en 0,60 puntos, lo que se traduce en un dividendo mensual más bajo y un ahorro importante a lo largo del crédito. Esto hace que tu inversión sea más sostenible y que pagues menos cada mes.
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Si después de leer esto te preguntas “Entonces, ¿arrendar o comprar?”, la respuesta es sencilla: piensa en tu proyecto de vida. Si sueñas con estabilidad, un lugar propio y ver crecer el valor que hoy construyes, comprar un departamento es un paso tan lógico como alcanzable.